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El viaje de esperanza de una madre

Día 3

El viaje de esperanza de una madre

Por Leanna Simpson
Proverbios 3:5-6 Confía en Jehová con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia; Sométete a Él en todos tus caminos, y Él enderezará tus veredas.

En la vida, hacer lo correcto suele ser lo más difícil. Muy a menudo, nuestras ansiedades y temores nos dicen que tomemos el control de una situación porque creemos que podemos manejarla mejor que nuestro Dios. Únase a mí ahora para escuchar el corazón de amor y sacrificio de una madre bajo los obstáculos más difíciles... Esta es la historia de Alesia.

Alesia y su marido llegaron a Agape abrumados. Con cinco hijos que alimentar, incluido un bebé recién nacido, no podían creer que pudieran estar embarazadas una vez más. En estado de shock, se encontraron saliendo de Agape con una imagen de ultrasonido, algunos artículos para bebés y un nuevo consuelo. Se estaban sumando a su familia una vez más. No estaban seguros de cómo iban a hacerlo, pero sabían que, de alguna manera, todo estaría bien.

No sabían que su inesperado viaje traería más giros, vueltas y sorpresas de las que jamás hubieran imaginado.

El embarazo parecía transcurrir con normalidad. Cuando Alesia y su esposo fueron al médico para su ultrasonido de la semana 20, el médico les informó que algo andaba muy mal con la bebé Hollie. Vieron tres masas en el pulmón derecho del bebé, ejerciendo presión sobre su corazón, su pulmón izquierdo y más. Las masas dificultaban la respiración y el desarrollo adecuado de sus órganos. ¡No lo podían creer! ¿Cómo puede estar pasando esto?

Fueron enviados a un especialista. El comportamiento del especialista fue grave, informándoles que el feto tenía tres quistes llenos de líquido en los pulmones. “Podrían romperse en cualquier momento; la mayoría de la gente terminaría”, dijo. Aunque sabían que el aborto nunca fue una opción, la idea de dar a luz a un niño muerto era desgarradora. ¿Qué debemos hacer? Después de unos momentos de deliberación, supieron: elegiremos el duro camino.

Alrededor de las 25 semanas, los médicos comenzaron a temer tanto por la vida del bebé y Alesia. Empezaban a manifestarse signos de preeclampsia. Lo que había comenzado como un embarazo inesperado se convirtió ahora en una crisis médica con dos vidas en juego. elegiremos el duro camino.

A las 34 semanas, no se pudo ignorar la preeclampsia de Alesia y la indujeron a dar a luz. Su salud comenzó a estabilizarse después del parto y la bebé Hollie parecía estar bien en la UCIN con oxígeno. Dos días después del nacimiento de Hollie, uno de los quistes de sus pulmones se rompió. Su pulmón colapsó y el aire se filtró hacia su cavidad torácica. La vida de Hollie estaba en juego. La llevaron de urgencia a cirugía. elegiremos el duro camino… no importa lo que venga.

Hollie, por elección divina de Dios, se salvó. Su vida fue preservada. Los médicos estaban desconcertados. Si Alesia no hubiera tenido preeclampsia y hubiera necesitado una inducción de emergencia, habría dado a luz a una bebé muerta, Hollie.

El hombre no podía ver lo que estaba por venir... pero Dios sí podía, y decidió salvar dos vidas. Eligió curar a dos personas. Eligió mostrar a una familia y a un equipo de médicos, enfermeras y personal sanitario que Dios sigue siendo el Gran Médico, el dador y preservador de TODA la vida. 


La bebé Hollie estuvo en el hospital durante cuatro semanas para estabilizarse y sanar. Se fue a casa con oxígeno como soporte respiratorio. Los médicos alentaron a Alesia a amamantar a la bebé Hollie, ya que era lo mejor para su curación continua. Los médicos ignoraban que Alesia nunca había podido producir leche para amamantar a ninguno de sus hijos. Dios, confiamos en ti… y elegiremos el duro camino.

Dios, una vez más, abrió un camino. Lo que antes era imposible se hizo posible por primera vez.

Hace aproximadamente un mes, a la bebé Hollie le quitaron el oxígeno. ¡Le está yendo bien y creciendo! Todavía tiene 2 quistes en el pulmón. ¡Seguimos orando para que Dios preserve, proteja y sane a la bebé Hollie!

Esta historia da testimonio de que cada día caminamos por un camino incierto. No sabemos qué nos deparará el mañana, pero sabemos quién nos deparará el mañana. En todas las cosas, en cada encrucijada y valle, en cada cima de montaña y en cada camino sinuoso, sabemos que no importa lo que pueda suceder, ¡Dios está en Su trono, y Él es tan, tan bueno!

Escritura adicional: Salmos 62, 1 Juan 5:1-12

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